¡Muy buenas a todos y todas! Como reza el título de la entrada, se cumple ya un año desde que dimos a conocer a una recién nacida fase beta de Warhammer Reforged. Un año desde que Yibrael, Ragnor y Endakil presentaran al mundo su visión de lo que era Warhammer. Un año ya... ¡Cómo pasa el tiempo cuando te lo estás pasando bien! Se trata pues de una época de alegrías y festejos, pero también significa que toca hacer balance de lo vivido.
UN AÑO DE REFORGED
Lo primero de todo será situarnos en antecedentes, para que a nadie le pille de nuevas. Tras el cierre de la línea oficial de WFB, los desarrolladores de Reforged se negaron a aceptar el mandato de Games Workshop que acababa de un plumazo con casi treinta años de historia del universo de Warhammer, y comenzaron a trabajar en lo que sería la versión alfa del sistema. Se realizaron grupos reducidos de testeo hermético, y tras una serie de pruebas se presentó a la comunidad la versión beta de Warhammer Reforged un martes día 1 de diciembre de 2015, junto con la versión beta de los libros de ejército de Imperio y de Orcos y Goblins.
Durante los meses siguientes, semana a semana, se fue publicando la versión beta de los distintos libros de ejército; diecisiete manuales con los que poder representar un total de veintiún ejércitos distintos. Una vez fueron presentados los libros de ejército, se terminaron de recopilar todos los personajes especiales más relevantes de las distintas ediciones de WFB (más de 200) y presentados a la comunidad en una serie de suplementos titulados “Héroes y Villanos” para incluirlos posteriormente en los propios libros de ejército. La versión beta de Reforged duró un total de seis meses, en los cuales decenas de jugadores comenzaron a jugar partidas y a enviar sus impresiones al equipo de Reforged. De este modo se evitó en gran medida el efecto “lista de deseos”, y sus diseñadores pudieron dedicar mayor tiempo a valorar las opiniones mejor argumentadas para realizar los cambios pertinentes en el sistema y libros de ejército.
En julio de 2016 se termina de publicar la edición corregida del sistema y de los libros de ejército (a excepción del libro de Mercenarios, cuya beta salió más tarde). Desde entonces, cada martes ha aparecido un suplemento ExtraReforged en el que se amplía la variedad de opciones disponibles para los distintos ejércitos, así como reglas adicionales, escenarios y demás material.
Lo primero de todo será situarnos en antecedentes, para que a nadie le pille de nuevas. Tras el cierre de la línea oficial de WFB, los desarrolladores de Reforged se negaron a aceptar el mandato de Games Workshop que acababa de un plumazo con casi treinta años de historia del universo de Warhammer, y comenzaron a trabajar en lo que sería la versión alfa del sistema. Se realizaron grupos reducidos de testeo hermético, y tras una serie de pruebas se presentó a la comunidad la versión beta de Warhammer Reforged un martes día 1 de diciembre de 2015, junto con la versión beta de los libros de ejército de Imperio y de Orcos y Goblins.
Durante los meses siguientes, semana a semana, se fue publicando la versión beta de los distintos libros de ejército; diecisiete manuales con los que poder representar un total de veintiún ejércitos distintos. Una vez fueron presentados los libros de ejército, se terminaron de recopilar todos los personajes especiales más relevantes de las distintas ediciones de WFB (más de 200) y presentados a la comunidad en una serie de suplementos titulados “Héroes y Villanos” para incluirlos posteriormente en los propios libros de ejército. La versión beta de Reforged duró un total de seis meses, en los cuales decenas de jugadores comenzaron a jugar partidas y a enviar sus impresiones al equipo de Reforged. De este modo se evitó en gran medida el efecto “lista de deseos”, y sus diseñadores pudieron dedicar mayor tiempo a valorar las opiniones mejor argumentadas para realizar los cambios pertinentes en el sistema y libros de ejército.
El volumen de "Leyendas", en el que aparecieron los personajes especiales que tienen una relevancia singular dentro del mundo de Warhammer
A lo largo de este periplo en el tiempo, la mayoría de jugadores de Reforged han claudicado ante nuestras propuestas. Es una manera contundente de decir que les han gustado mucho. Desde el reglamento en su versión definitiva hasta los ExtraReforged y pasando por cada libro de ejército, quienes han probado Reforged han quedado encantado en su mayoría con el resultado final. Por supuesto siempre hay jugadores que cambiarían tal o cual detalle, y que nos preguntan por qué no hemos resuelto ciertos aspectos de otra manera. Pese a que seguimos con la mente abierta en la discusión de ciertos aspectos o detalles, creemos que la versión definitiva de Warhammer Reforged ayuda a representar a la perfección el espíritu de juego del que siempre hemos tratado de hacer gala. Warhammer Reforged es un juego, un juego para disfrutar con los amigos y con gente afín, aquellas personas que disfrutan representando batallas en el mundo de Warhammer.
Una batalla con 10000 puntos sobre la mesa
LOS EXTRAREFORGED
Una de las cosas que sin duda ha ayudado a que el proyecto crezca sin descanso semana tras semana son los suplementos ExtraReforged. La que en principio surgió como una solución de compromiso para incluir aquellas cosas que no tuvieron cabida de otro modo en los libros de ejército y/o el reglamento ha resultado ser una herramienta indispensable para que centenares de jugadores mantengan despierto su interés en el proyecto.
Los ExtraReforged sirven a un doble propósito; rescatar aquellas opciones relegadas al olvido así como adaptar aquellas unidades que aparecieron con los últimos estertores de la octava edición de WFB, pero también sirven para fomentar el “buenrollismo” y el “fair-play” tanto en la partida como antes de hacer la lista de ejército. Es “vox populi” que las opciones ExtraReforged solamente pueden usarse con el consentimiento del oponente, aunque no hemos tenido nunca noticias de nadie a quien un amigo le haya dicho “no puedes usar tal cosa”. Además, está sirviendo para ofrecerles a los jugadores otros modos de representar sus batallas, para resolver conflictos de canon del propio trasfondo del juego, y para que sus diseñadores no paren de pensar en maneras de plasmar sobre unas reglas lo que el mundo de Warhammer representa en todas sus formas. Listas de ejército alternativas, reglas adicionales, nuevos y viejos personajes especiales, nuevas y viejas tropas... todo tiene cabida dentro de los ExtraReforged.
Madame Kalfon, un personaje de WFRP adaptado a Warhammer Reforged
LA APP DE BIBLIOTECA DEL VIEJO MUNDO / REFORGED
Pero la que ha sido la estrella recién nacida que nos ha sorprendido a todos ha sido la App de Reforged y Biblioteca del Viejo Mundo. Esta pequeña maravilla desarrollada por Wikia todavía nos tiene un poco descolocados ante las posibilidades que ofrece. La manera en que podemos navegar por todo el trasfondo en castellano sobre el mundo de Warhammer es sencillamente genial, rápida e intuitiva. También ofrece a todos los jugadores la posibilidad de poder consultar las reglas de las tropas de Reforged de la manera más sencilla posible. Pero tampoco me puedo olvidar de la sala de discusiones que sirve para que sus usuarios y usuarias puedan intercambiar sus opiniones. Puedo aseguraros que el trabajo realizado por los titánicos colaboradores de la Biblioteca del Viejo Mundo ha sido colosal, porque lo he visto y hemos trabajado codo con codo para ello. Y solo para que dicha app estuviese lista para ser presentada a la comunidad. El trabajo que queda por delante no es pequeño, pero estoy seguro de que lo afrontaremos con valor y muchas, muchas ganas.
FOROS DE DISCUSIÓN
También me veo obligado a hacer una mención especial a los diversos foros de discusión sobre el mundo de Warhammer en los que he comenzado a participar desde entonces, con el fin de dar a conocer el proyecto al resto de jugadores y jugadoras que se estremecieron con el cierre de la línea oficial de Warhammer Fantasy. Estos espacios de discusión son fundamentales para dar a conocer cualquier idea al mundo, y me gustaría hacer una mención sobre los tres que considero más importantes, así como animaros a participar en ellos:
- El grupo de Facebook de Warhammer Reforged. En este grupo se encuentran los jugadores de Reforged más activos, así como los más interesados en compartir sus opiniones, fotos de sus miniaturas y proyectos basados en Reforged.
- El foro Warhammer Aquí. Sin duda alguna, se trata del foro más activo que he encontrado hasta la fecha sobre el mundo de Warhammer y sus variantes. En él participan jugadores de todas las iniciativas, jugadores con años de experiencia en diversos juegos que comparten una tónica general de discusiones constructivas y con puntos de vista muy variados.
También me veo obligado a hacer una mención especial a los diversos foros de discusión sobre el mundo de Warhammer en los que he comenzado a participar desde entonces, con el fin de dar a conocer el proyecto al resto de jugadores y jugadoras que se estremecieron con el cierre de la línea oficial de Warhammer Fantasy. Estos espacios de discusión son fundamentales para dar a conocer cualquier idea al mundo, y me gustaría hacer una mención sobre los tres que considero más importantes, así como animaros a participar en ellos:
- El grupo de Facebook de Warhammer Reforged. En este grupo se encuentran los jugadores de Reforged más activos, así como los más interesados en compartir sus opiniones, fotos de sus miniaturas y proyectos basados en Reforged.
- El foro Warhammer Aquí. Sin duda alguna, se trata del foro más activo que he encontrado hasta la fecha sobre el mundo de Warhammer y sus variantes. En él participan jugadores de todas las iniciativas, jugadores con años de experiencia en diversos juegos que comparten una tónica general de discusiones constructivas y con puntos de vista muy variados.
-El foro Wargamez. Reconozco que el mayor motivo por el cual sigo promocionando este foro es por simple manía personal. El que antaño fuera una referencia entre los foros latinoamericanos, hoy en día se encuentra bastante apagado en lo referente al mundo de Warhammer pero sigue resultando un lugar estupendo donde ponerse a rebuscar manuales. Por los servicios prestados a la comunidad de Warhammer, lo elegí desde un inicio para dar a conocer el proyecto a nuestros hermanos al otro lado del charco.
REFORGED ES Y SERÁ
Quisiera también dedicarles unas líneas a todos aquellos que nos siguen escribiendo con insistencia, pidiéndonos que cambiemos ciertos aspectos del reglamento, alegando que hay reglas que están supuestamente abiertas a la libre interpretación de cada uno. Recordad siempre “LA REGLA MÁS IMPORTANTE”. Quiero recordarles a todos aquellos jugadores que no están plenamente satisfechos con todos y cada uno de los aspectos de Reforged que SIEMPRE hay otro modo de hacer las cosas si la gente está de acuerdo. Podéis utilizar vuestras propias “reglas de la casa” siempre que lo consideréis más divertido, siempre que lo consideréis más acorde al espíritu de Warhammer y, por qué no decirlo, siempre que lo consideréis más justo -o mejor dicho, ajustado-. No vamos a enfadarnos en absoluto por que lo hagáis, ni vamos a ir a vuestras casas a obligaros a hacer las cosas a nuestra manera ni a limaros las miniaturas para comprobar que son de GW. Si queréis, por ejemplo, utilizar el sistema de línea de visión por escalas de otro juego para sustituir la línea de visión real que se utiliza en Reforged porque consideráis que es más divertido o porque creéis que así os evitáis el tener discusiones, lo podéis hacer sin tener que pedir permiso a sus diseñadores.
PERO, queremos dejar claro lo siguiente. Cada aspecto del sistema de Reforged no ha sido diseñado solamente para representar las batallas acontecidas en el mundo de Warhammer con toda la fidelidad posible, sino también para representar un espíritu de juego cordial entre jugadores y que fomente la diversión entre las personas que los utilicen. Creemos que cualquier sistema puede ser retorcido hasta la saciedad por aquellos jugadores que le busquen las vueltas, y no creemos que una supuesta pérdida de equilibrio sea razón suficiente para limitar las opciones o para capar su poder destructivo. Vemos que muchos de los problemas a los que uno se enfrenta cuando pretende divertirse con tal o cual reglamento nacen de los propios jugadores y no de un sistema desequilibrado.
Por todas estas razones quiero recordar dos cosas: primero, que lo importante cuando se va a representar una batalla es buscar tanto la victoria como la diversión para ti y tu oponente. Segundo, que Reforged solo sufrirá correcciónes con la intención de eliminar erratas, y nunca bajo la intención obtener un mayor equilibrio porque consideramos que refleja al 100% el espíritu de juego que queremos fomentar.
REFORGED ES Y SERÁ
Quisiera también dedicarles unas líneas a todos aquellos que nos siguen escribiendo con insistencia, pidiéndonos que cambiemos ciertos aspectos del reglamento, alegando que hay reglas que están supuestamente abiertas a la libre interpretación de cada uno. Recordad siempre “LA REGLA MÁS IMPORTANTE”. Quiero recordarles a todos aquellos jugadores que no están plenamente satisfechos con todos y cada uno de los aspectos de Reforged que SIEMPRE hay otro modo de hacer las cosas si la gente está de acuerdo. Podéis utilizar vuestras propias “reglas de la casa” siempre que lo consideréis más divertido, siempre que lo consideréis más acorde al espíritu de Warhammer y, por qué no decirlo, siempre que lo consideréis más justo -o mejor dicho, ajustado-. No vamos a enfadarnos en absoluto por que lo hagáis, ni vamos a ir a vuestras casas a obligaros a hacer las cosas a nuestra manera ni a limaros las miniaturas para comprobar que son de GW. Si queréis, por ejemplo, utilizar el sistema de línea de visión por escalas de otro juego para sustituir la línea de visión real que se utiliza en Reforged porque consideráis que es más divertido o porque creéis que así os evitáis el tener discusiones, lo podéis hacer sin tener que pedir permiso a sus diseñadores.
PERO, queremos dejar claro lo siguiente. Cada aspecto del sistema de Reforged no ha sido diseñado solamente para representar las batallas acontecidas en el mundo de Warhammer con toda la fidelidad posible, sino también para representar un espíritu de juego cordial entre jugadores y que fomente la diversión entre las personas que los utilicen. Creemos que cualquier sistema puede ser retorcido hasta la saciedad por aquellos jugadores que le busquen las vueltas, y no creemos que una supuesta pérdida de equilibrio sea razón suficiente para limitar las opciones o para capar su poder destructivo. Vemos que muchos de los problemas a los que uno se enfrenta cuando pretende divertirse con tal o cual reglamento nacen de los propios jugadores y no de un sistema desequilibrado.
Por todas estas razones quiero recordar dos cosas: primero, que lo importante cuando se va a representar una batalla es buscar tanto la victoria como la diversión para ti y tu oponente. Segundo, que Reforged solo sufrirá correcciónes con la intención de eliminar erratas, y nunca bajo la intención obtener un mayor equilibrio porque consideramos que refleja al 100% el espíritu de juego que queremos fomentar.
Y sobre el futuro de Reforged, bueno... el futuro no está escrito. Todavía. Lo que sí tenemos muy claro es que los pilares sobre los que se ha reescrito Reforged son sólidos como una roca, tanto a nivel de reglas como en el espíritu de la iniciativa. También sabemos que queda muchísimo trabajo por delante, y que seguiremos contando con nuestros jugadores, tanto para pedir su ayuda como escuchando sus opiniones o atendiendo a sus peticiones. Eso es algo que no va a cambiar jamás. En consecuencia, seguirá habiendo Reforged para rato.
EN LO PERSONAL
“Yo he visto cosas que vosotros no creeríais, mhm... he visto fanboys atacar otras iniciativas mas allá del cinturón de su comprensión... he visto las esperanzas de la gente brillar en la oscuridad cuando iban a deshacerse de sus miniaturas cerca de las puertas del eBay... todos esos momentos no se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia. Es hora de sonreír."
Quiero decir con este texto introductorio que a partir de este momento ya no estoy hablando como un miembro de Reforged, sino tal cual somos mi pedrada y yo. Espero que sepáis apreciar la diferencia. En este último año de mi vida (más o menos) al frente de las relaciones públicas de Reforged me he llevado muy gratos momentos, sin duda. Y otros en los que la bilis me salía por los agujeros de la nariz. Me he visto en ocasiones desbordado ante el ser humano de las redes, ese gran desconocido. He de admitir también que hubo veces que he llegado a perder los papeles ante los comentarios de ciertas personas que se niegan a comprender o aceptar ciertas posturas y argumentos, y tengo claro que esto no debe volver a pasarme. Por fortuna esas ocasiones pueden contarse con los dedos de una mano, y consigo tomármelo con humor una vez puedo verlo en perspectiva. Si alguno de los implicados lee estas líneas, quisiera pedirte sinceras disculpas por no haber tenido suficiente paciencia para repetirte las cosas con calma una vez más.
Esto viene en ocasiones derivado de que no soy una verdadera “autoridad” dentro del equipo de Reforged... o más bien, viene a consecuencia de la necesidad de autoridad que tienen algunas personas. Una necesidad de que alguien les diga qué es divertido y qué no, qué vale y qué "está roto", como dicen los jóvenes. Así que cuando digo algo que no gusta nadie me hace caso, pero cuando me equivoco y digo una burrada (cosa que suele ocurrir cada 20-30 segundos) es el proyecto el que queda mal entonces... es fantástico ser yo, deberíais probarlo algún día. Y es que hay jugadores (como cualquier ser humano) que me resultan muy pintorescos. No hay que avergonzarse de ello; todos y todas somos personajes en este juego de rol que nos ha tocado vivir. Por ejemplo, hay quienes nos insisten en que se cambien aquellos puntos del reglamento con los que no están de acuerdo sin tener en cuenta nuestras razones para mantenerlos, olvidándose por completo de que son puntos avalados por nuestra comunidad de jugadores y obviando el hecho de que ellos mismos pueden cambiar lo que quieran del sistema para jugar con sus amigos.
También los hay que se han posicionado totalmente en contra del proyecto, señalando tanto a jugadores como diseñadores de Reforged por exponer de manera pública aquellos puntos por los que consideramos que 9th Age no es Warhammer; detalles que poco tienen que ver con el verdadero espíritu de una iniciativa fan-made nacida de los jugadores, por no hablar otra vez de la ausencia total y absoluta de cualquier referencia al trasfondo del mundo de Warhammer. Me atrevo a afirmar que se enfadan por lo que se argumenta y no por las formas en que esto es argumentado. Habremos herido muchos sentimientos y seremos "malisisísimos" por ello... pero tampoco nos han demostrado que estemos equivocados, y supongo que siempre habrá gente que preferirá comer jabón y decir que es queso antes que admitir un fallo en su manera de pensar. Porque ciertos argumentos hacen que hasta la fe más ciega pueda tambalearse, y eso es algo que tiene que doler. En ocasiones se nos ha tratado como si solamente fuésemos nosotros -y no sus propios jugadores- quienes denunciábamos de manera pública ciertas acciones de los directores de la iniciativa que ignoraban por completo las peticiones de su comunidad. Hay quienes siguen sin -querer- comprender que si Reforged existe es para darle a los jugadores la opción de disfrutar del mundo de Warhammer de un modo que cada día complace a más y más jugadores, y no porque queramos enarbolar la bandera de Warhammer en nuestro nombre. Se cree el ladrón...
¿Pero qué es lo que hace de Reforged verdaderamente distinto a otras iniciativas fan-made? Pues que las condiciones que fomentaron su nacimiento han sido verdaderamente altruistas. Sus diseñadores antepusieron una idea (Warhammer) frente a sus pretensiones personales. Tomaron aquello que significaba Warhammer para ellos y lo plasmaron sobre el papel. ¿Qué más daba si a esto sólo lo jugaban cuatro gatos? Aunque lo hubiésen hecho para que solo lo jugaran ellos y sus amigos, para mí ya hubiese merecido la pena porque yo disfrutaría lo mismo jugándolo. Yo entiendo en parte que haya gente que valore el tener la posibilidad de poder irse a Luxemburgo, a Suiza o a Polonia y seguir encontrando gente con la que poder echar una partida, pero para aquellos y aquellas que somos pobres como las ratas y que nos cuesta dios y ayuda llegar a fin de mes nos conformamos con poder echar una partida con los amigos a algún juego divertido cuando nos lo permiten las obligaciones de la vida cotidiana. Todas las iniciativas fan-made que han nacido tras el cierre de Warhammer lo hicieron (supuestamente) para que los jugadores recuperasen algo que una empresa les había arrebatado, y entre todas han demostrado que hay varias formas de conseguirlo.
Por otra parte, puedo entender que haya jugadores que se sientan ofendidos cuando les tocan sus ideales. Y me refiero en concreto a la iniciativa 9th Age, el adalid de los wargames equilibrados. Sé que a nadie le gusta que lo critiquen si es para quedar en mal lugar, pero es lo que conlleva el ser la iniciativa máspopulista popular nacida tras el cierre de Warhammer; que se va a hablar de ella, guste o no guste. A diferencia de como se presentó la iniciativa de 9th Age, desde Reforged nunca se trató de movilizar al grueso de los "jugadores sin rumbo" para que todos ellos adoptaran de manera mesiánica nuestra propuesta. Se presentó como una alternativa más, disponible para quienes quisieran hacer uso de ella. Queríamos dar a conocer el proyecto como lo querría hacer cualquiera, ¡faltaría más! Pero si cada vez más y más gente está probando Reforged y otras iniciativas tal vez sea porque la pulida estrategia conocida como "¡prueba 9th Age, es Warhammer!" no ha resultado ser tan buena idea como aparentaba en un principio, y sus jugadores vuelven a movilizarse fruto de ese desengaño. Seré un arrogante por decir esto, pero resulta morbosamente placentero ver cómo se apagan aquellas voces que decían "está menos trabajado que 9th Age" cuando en pocos meses se ha hecho evidente el sorpasso a nivel de reglas, ejércitos y opciones.
De todas formas, no se pueden negar los logros de esta iniciativa todavía inacabada. Sigue contando con una comunidad de miles de seguidores que participan en sus torneos por todo el mundo como ya lo hacían previamente en la liga de torneos ETC, y... y ya. Tampoco se puede negar que entre todos ellos hay jugadores que se han mudado a dicha iniciativa en un sano intento de apartarse del mundo de Warhammer porque ya no les satisface. Por desgracia, lanzar una iniciativa de esta envergadura sin tener un gran conocimiento previo sobre el campo a tratar y sin poseer una idea clara de cuales van a ser los objetivos a conseguir implica invertir meses (si no años) de trabajo innecesario, quemando y desanimando a la misma comunidad que te nutre de ideas y que está entregando horas y horas de su vida a una causa. Y no voy a entrar a hablar más sobre lo que me parecería que comercializasen dicha iniciativa, porque creo que ya es de sobra conocido. Aun así, dado el ritmo con el que se suceden las actualizaciones que sigue sufriendo el sistema y los libros de ejército, va a tardar en conocerse el final de esa telanovela. De todos modos, es lógico que lleve su tiempo el pulir hasta el mas mínimo detalle de un juego basado en el equilibrio y que busca con tenacidad eliminar cualquier atisbo de desequilibrio, a fin de erradicar cualquier posibilidad de discusión y duda durante el juego.
También me gustaría dedicar unas palabras a todos aquellos jugadores y jugadoras que “no tocarían Warhammer Refrito ni con un palo”: si alguna vez has dicho estas palabras -o similares- tras haber leido el reglamento, que sepas que lo entiendo y lo respeto. Yo y todos. No a todo el mundo puede gustarle lo mismo. Y de hecho, ese es otro motivo por el cual existe Reforged. Sus desarrolladores, expertos veteranos que han visto nacer y morir el mundo de Warhammer no se sentían cómodos usando otras iniciativas, y tuvieron tesón suficiente para crear algo que sí reflejara su modo de entender el juego. Creo que nunca jamás me he burlado de un jugador por gustarle algo distinto, gustos sanos que nacen de las experiencias de cada uno/a (aunque... es posible que soltase alguna broma sobre los jugadores de AoS en su momento, pero es algo de lo que ahora os juro me arrepiento). Aplaudimos y nos alegramos de que existan varias iniciativas hechas por y para los fans de Warhammer, porque cada una de ellas, a su modo, representa un arquetipo de jugador de Warhammer, y todos ellos merecen un sistema con el que se sientan identificados. Por eso sabíamos de entrada que Reforged no iba a gustarle a todo el mundo, y fue presentado con humildad.
Pero entended también, por favor os lo pido, que cuando un jugador de 9th Age me pone como excusa para no probar Reforged que "pasa de leerse más manuales" cuando se los renuevan cada dos meses, o me suelta que "9th Age es Warhammer porque Warhammer lo son sus jugadores" o un "me da igual, somos más" por no darte la razón, pues como que me es muy difícil aguantarme la risa que me pega por dentro. Lo mismo que cuando va alguien y suelta "no me gusta porque no es oficial, la única edición fanmade oficial es MDNR"... ¿En serio, de verdad? Pues eso, que me parece perfecto que haya mil iniciativas, pero me opongo a esa mentalidad empresarial que hace mirar al resto como posibles ladrones de una potencial clientela. Y que no es que yo sea tan arrogante, jopé, que es que van provocando...
Ya puestos a divagar, y si me preguntáis por el personaje más pintoresco que con el que me haya cruzado en todo este tiempo, lo tengo claro como el agua. Porque quien más y quien menos todos somos unos personajes, ya lo he dicho. Y me incluyo. Pero de entre todos los personajes que he conocido en estos meses elegiría sin dudar a un individuo que -tras sufrir un lapsus Freudiano del cual hay pantallazo, solo por si acaso- reconoció haber pretendido engañar a los organizadores o referencias de las distintas iniciativas fan-made más populares sobre Warhammer -o basadas en él- para que cooperásemos todos en la creación de “algo más grande” que todo lo que ya había hasta ahora. Hasta él mismo definió su trabajo como un batiburrillo, con él como director de orquesta. Un tipo que se enfadó cuando le dije de la manera más educada posible que no pensábamos participar en eso. ¿Cómo, oh, no se nos había ocurrido antes que si trabajásemos juntos los trasfondísticos, los competitivos, los conservadores, los innovadores y los legalistas bajo los designios de un titiritero cualquiera no íbamos a ser capaces de dejar nuestras profundas diferencias a un lado y a invertir nuestro tiempo en hacer algo que gustase a todos los jugadores del mundo por igual? ¿¡Cómo digo, cómo!? Mientras estoy taconeando de sentado en mi silla de trece euros te digo "¡olé, viva y bravo!" por tu inventiva con la mayor de mis sonrisas a la vez que aplaudo dándome de sopapos una mano para quitarme mi sombrero imaginario con la otra. Tampoco voy desvelar su identidad porque ya me he reido bastante, pero daros cuenta de la genialidad que se gasta el hombre para que se haya merecido que le dedique este párrafo entero y todo. Gracias por recordarme que en esta vida tiene que haber de todo.
Y por último, quisiera hacer una mención muy especial; no solo a los diseñadores de Reforged, a quienes trato de agradecer día tras día el esfuerzo y la pasión que han volcado en el proyecto. Me refiero a todos aquellos jugadores que he ido conociendo (o conociendo mejor) en este último año. Querría hablaros de aquellos que comparten nuestro modo de ver y entender el hobby. Quienes también mantienen viva la llama de la pasión en este mundillo. De esos que nos hacen ver que no estamos tan locos... o al menos, que comparten nuestra locura. Esas personas que desde un primer momento nos tendieron sus manos para ayudarnos sin pensárselo dos veces. Esa gente que ha tomado Reforged como si fuera suyo. Aquellos que no han parado de mirar sus manuales, de enviarnos sus opiniones. Incluso gente que apenas tiene tiempo u oportunidades de jugar una partida. Aquellos que con sus blogs, sus artículos, sus vídeos... dan a conocer el proyecto a la comunidad y hablan con otros jugadores y jugadoras para que le den a Reforged una oportunidad. Jugadores y jugadoras que han tomado el trabajo de Reforged y que lo amplían a su manera para compartirlo con los demás. Aquellos que comprendieron a la primera que Reforged no es simplemente un juego, sino una filosofía de juego. Incluso gente que puede que nunca pruebe Reforged por razones diversas, pero que igualmente sabe reconocer un trabajo bien hecho y sabe reconocer el esfuerzo invertido. Gente que tengo claro, de no ser por el tiempo y la distancia, me atiborraría con ellos hasta el culo de piedra bruja y de cerveza enana mientras jugamos partidas y partidas para luego olvidarnos de contar los puntos de victoria. A quienes me refiero... ya lo saben de sobra. ¡Qué demonios, incluso Bairrin lo sabe! Y es que me gustaría, de verdad que me gustaría poder articular un conjunto de palabras bonitas para ellos y que reflejasen de manera idónea ese torrente de emociones positivas que me produce el haberles conocido a todos ellos. Pero me temo que ahora mismo no se me ocurre nada...
“Yo he visto cosas que vosotros no creeríais, mhm... he visto fanboys atacar otras iniciativas mas allá del cinturón de su comprensión... he visto las esperanzas de la gente brillar en la oscuridad cuando iban a deshacerse de sus miniaturas cerca de las puertas del eBay... todos esos momentos no se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia. Es hora de sonreír."
Quiero decir con este texto introductorio que a partir de este momento ya no estoy hablando como un miembro de Reforged, sino tal cual somos mi pedrada y yo. Espero que sepáis apreciar la diferencia. En este último año de mi vida (más o menos) al frente de las relaciones públicas de Reforged me he llevado muy gratos momentos, sin duda. Y otros en los que la bilis me salía por los agujeros de la nariz. Me he visto en ocasiones desbordado ante el ser humano de las redes, ese gran desconocido. He de admitir también que hubo veces que he llegado a perder los papeles ante los comentarios de ciertas personas que se niegan a comprender o aceptar ciertas posturas y argumentos, y tengo claro que esto no debe volver a pasarme. Por fortuna esas ocasiones pueden contarse con los dedos de una mano, y consigo tomármelo con humor una vez puedo verlo en perspectiva. Si alguno de los implicados lee estas líneas, quisiera pedirte sinceras disculpas por no haber tenido suficiente paciencia para repetirte las cosas con calma una vez más.
Esto viene en ocasiones derivado de que no soy una verdadera “autoridad” dentro del equipo de Reforged... o más bien, viene a consecuencia de la necesidad de autoridad que tienen algunas personas. Una necesidad de que alguien les diga qué es divertido y qué no, qué vale y qué "está roto", como dicen los jóvenes. Así que cuando digo algo que no gusta nadie me hace caso, pero cuando me equivoco y digo una burrada (cosa que suele ocurrir cada 20-30 segundos) es el proyecto el que queda mal entonces... es fantástico ser yo, deberíais probarlo algún día. Y es que hay jugadores (como cualquier ser humano) que me resultan muy pintorescos. No hay que avergonzarse de ello; todos y todas somos personajes en este juego de rol que nos ha tocado vivir. Por ejemplo, hay quienes nos insisten en que se cambien aquellos puntos del reglamento con los que no están de acuerdo sin tener en cuenta nuestras razones para mantenerlos, olvidándose por completo de que son puntos avalados por nuestra comunidad de jugadores y obviando el hecho de que ellos mismos pueden cambiar lo que quieran del sistema para jugar con sus amigos.
También los hay que se han posicionado totalmente en contra del proyecto, señalando tanto a jugadores como diseñadores de Reforged por exponer de manera pública aquellos puntos por los que consideramos que 9th Age no es Warhammer; detalles que poco tienen que ver con el verdadero espíritu de una iniciativa fan-made nacida de los jugadores, por no hablar otra vez de la ausencia total y absoluta de cualquier referencia al trasfondo del mundo de Warhammer. Me atrevo a afirmar que se enfadan por lo que se argumenta y no por las formas en que esto es argumentado. Habremos herido muchos sentimientos y seremos "malisisísimos" por ello... pero tampoco nos han demostrado que estemos equivocados, y supongo que siempre habrá gente que preferirá comer jabón y decir que es queso antes que admitir un fallo en su manera de pensar. Porque ciertos argumentos hacen que hasta la fe más ciega pueda tambalearse, y eso es algo que tiene que doler. En ocasiones se nos ha tratado como si solamente fuésemos nosotros -y no sus propios jugadores- quienes denunciábamos de manera pública ciertas acciones de los directores de la iniciativa que ignoraban por completo las peticiones de su comunidad. Hay quienes siguen sin -querer- comprender que si Reforged existe es para darle a los jugadores la opción de disfrutar del mundo de Warhammer de un modo que cada día complace a más y más jugadores, y no porque queramos enarbolar la bandera de Warhammer en nuestro nombre. Se cree el ladrón...
¿Pero qué es lo que hace de Reforged verdaderamente distinto a otras iniciativas fan-made? Pues que las condiciones que fomentaron su nacimiento han sido verdaderamente altruistas. Sus diseñadores antepusieron una idea (Warhammer) frente a sus pretensiones personales. Tomaron aquello que significaba Warhammer para ellos y lo plasmaron sobre el papel. ¿Qué más daba si a esto sólo lo jugaban cuatro gatos? Aunque lo hubiésen hecho para que solo lo jugaran ellos y sus amigos, para mí ya hubiese merecido la pena porque yo disfrutaría lo mismo jugándolo. Yo entiendo en parte que haya gente que valore el tener la posibilidad de poder irse a Luxemburgo, a Suiza o a Polonia y seguir encontrando gente con la que poder echar una partida, pero para aquellos y aquellas que somos pobres como las ratas y que nos cuesta dios y ayuda llegar a fin de mes nos conformamos con poder echar una partida con los amigos a algún juego divertido cuando nos lo permiten las obligaciones de la vida cotidiana. Todas las iniciativas fan-made que han nacido tras el cierre de Warhammer lo hicieron (supuestamente) para que los jugadores recuperasen algo que una empresa les había arrebatado, y entre todas han demostrado que hay varias formas de conseguirlo.
Por otra parte, puedo entender que haya jugadores que se sientan ofendidos cuando les tocan sus ideales. Y me refiero en concreto a la iniciativa 9th Age, el adalid de los wargames equilibrados. Sé que a nadie le gusta que lo critiquen si es para quedar en mal lugar, pero es lo que conlleva el ser la iniciativa más
De todas formas, no se pueden negar los logros de esta iniciativa todavía inacabada. Sigue contando con una comunidad de miles de seguidores que participan en sus torneos por todo el mundo como ya lo hacían previamente en la liga de torneos ETC, y... y ya. Tampoco se puede negar que entre todos ellos hay jugadores que se han mudado a dicha iniciativa en un sano intento de apartarse del mundo de Warhammer porque ya no les satisface. Por desgracia, lanzar una iniciativa de esta envergadura sin tener un gran conocimiento previo sobre el campo a tratar y sin poseer una idea clara de cuales van a ser los objetivos a conseguir implica invertir meses (si no años) de trabajo innecesario, quemando y desanimando a la misma comunidad que te nutre de ideas y que está entregando horas y horas de su vida a una causa. Y no voy a entrar a hablar más sobre lo que me parecería que comercializasen dicha iniciativa, porque creo que ya es de sobra conocido. Aun así, dado el ritmo con el que se suceden las actualizaciones que sigue sufriendo el sistema y los libros de ejército, va a tardar en conocerse el final de esa telanovela. De todos modos, es lógico que lleve su tiempo el pulir hasta el mas mínimo detalle de un juego basado en el equilibrio y que busca con tenacidad eliminar cualquier atisbo de desequilibrio, a fin de erradicar cualquier posibilidad de discusión y duda durante el juego.
Solo por si este punto no quedaba claro y para demostraros que de verdad quiero que os divirtáis y que no surjan discusiones durante las partidas, he calculado el centro exacto de la unidad calculando la hipotenusa del triángulo rectángulo que se forma en el "centro ancho superior" de esta unidad de seis columnas y tres filas (ejém) que aparece como ejemplo en el reglamento de 9th Age. Está situado exactamente a partir de ciento treinta y ocho milímetros con seiscientas cincuenta y cuatro mil doscientas cuarenta y seis micras de cualquiera de las aristas de la unidad y realizando una tangente a treinta milímetros de los flancos o a sesenta y dos milímetros y medio del frontal o retaguardia. Personalmente, os recomendaría un micrómetro óptico de alta precisión de la marca Bitmakers, pese a que yo soy más de los compases Pelikan. ¡Hala! Ya he colaborado con 9th age, para que luego me digan que soy un "hater" que no sabe de lo que habla.
También me gustaría dedicar unas palabras a todos aquellos jugadores y jugadoras que “no tocarían Warhammer Refrito ni con un palo”: si alguna vez has dicho estas palabras -o similares- tras haber leido el reglamento, que sepas que lo entiendo y lo respeto. Yo y todos. No a todo el mundo puede gustarle lo mismo. Y de hecho, ese es otro motivo por el cual existe Reforged. Sus desarrolladores, expertos veteranos que han visto nacer y morir el mundo de Warhammer no se sentían cómodos usando otras iniciativas, y tuvieron tesón suficiente para crear algo que sí reflejara su modo de entender el juego. Creo que nunca jamás me he burlado de un jugador por gustarle algo distinto, gustos sanos que nacen de las experiencias de cada uno/a (aunque... es posible que soltase alguna broma sobre los jugadores de AoS en su momento, pero es algo de lo que ahora os juro me arrepiento). Aplaudimos y nos alegramos de que existan varias iniciativas hechas por y para los fans de Warhammer, porque cada una de ellas, a su modo, representa un arquetipo de jugador de Warhammer, y todos ellos merecen un sistema con el que se sientan identificados. Por eso sabíamos de entrada que Reforged no iba a gustarle a todo el mundo, y fue presentado con humildad.
Pero entended también, por favor os lo pido, que cuando un jugador de 9th Age me pone como excusa para no probar Reforged que "pasa de leerse más manuales" cuando se los renuevan cada dos meses, o me suelta que "9th Age es Warhammer porque Warhammer lo son sus jugadores" o un "me da igual, somos más" por no darte la razón, pues como que me es muy difícil aguantarme la risa que me pega por dentro. Lo mismo que cuando va alguien y suelta "no me gusta porque no es oficial, la única edición fanmade oficial es MDNR"... ¿En serio, de verdad? Pues eso, que me parece perfecto que haya mil iniciativas, pero me opongo a esa mentalidad empresarial que hace mirar al resto como posibles ladrones de una potencial clientela. Y que no es que yo sea tan arrogante, jopé, que es que van provocando...
Ya puestos a divagar, y si me preguntáis por el personaje más pintoresco que con el que me haya cruzado en todo este tiempo, lo tengo claro como el agua. Porque quien más y quien menos todos somos unos personajes, ya lo he dicho. Y me incluyo. Pero de entre todos los personajes que he conocido en estos meses elegiría sin dudar a un individuo que -tras sufrir un lapsus Freudiano del cual hay pantallazo, solo por si acaso- reconoció haber pretendido engañar a los organizadores o referencias de las distintas iniciativas fan-made más populares sobre Warhammer -o basadas en él- para que cooperásemos todos en la creación de “algo más grande” que todo lo que ya había hasta ahora. Hasta él mismo definió su trabajo como un batiburrillo, con él como director de orquesta. Un tipo que se enfadó cuando le dije de la manera más educada posible que no pensábamos participar en eso. ¿Cómo, oh, no se nos había ocurrido antes que si trabajásemos juntos los trasfondísticos, los competitivos, los conservadores, los innovadores y los legalistas bajo los designios de un titiritero cualquiera no íbamos a ser capaces de dejar nuestras profundas diferencias a un lado y a invertir nuestro tiempo en hacer algo que gustase a todos los jugadores del mundo por igual? ¿¡Cómo digo, cómo!? Mientras estoy taconeando de sentado en mi silla de trece euros te digo "¡olé, viva y bravo!" por tu inventiva con la mayor de mis sonrisas a la vez que aplaudo dándome de sopapos una mano para quitarme mi sombrero imaginario con la otra. Tampoco voy desvelar su identidad porque ya me he reido bastante, pero daros cuenta de la genialidad que se gasta el hombre para que se haya merecido que le dedique este párrafo entero y todo. Gracias por recordarme que en esta vida tiene que haber de todo.
Y por último, quisiera hacer una mención muy especial; no solo a los diseñadores de Reforged, a quienes trato de agradecer día tras día el esfuerzo y la pasión que han volcado en el proyecto. Me refiero a todos aquellos jugadores que he ido conociendo (o conociendo mejor) en este último año. Querría hablaros de aquellos que comparten nuestro modo de ver y entender el hobby. Quienes también mantienen viva la llama de la pasión en este mundillo. De esos que nos hacen ver que no estamos tan locos... o al menos, que comparten nuestra locura. Esas personas que desde un primer momento nos tendieron sus manos para ayudarnos sin pensárselo dos veces. Esa gente que ha tomado Reforged como si fuera suyo. Aquellos que no han parado de mirar sus manuales, de enviarnos sus opiniones. Incluso gente que apenas tiene tiempo u oportunidades de jugar una partida. Aquellos que con sus blogs, sus artículos, sus vídeos... dan a conocer el proyecto a la comunidad y hablan con otros jugadores y jugadoras para que le den a Reforged una oportunidad. Jugadores y jugadoras que han tomado el trabajo de Reforged y que lo amplían a su manera para compartirlo con los demás. Aquellos que comprendieron a la primera que Reforged no es simplemente un juego, sino una filosofía de juego. Incluso gente que puede que nunca pruebe Reforged por razones diversas, pero que igualmente sabe reconocer un trabajo bien hecho y sabe reconocer el esfuerzo invertido. Gente que tengo claro, de no ser por el tiempo y la distancia, me atiborraría con ellos hasta el culo de piedra bruja y de cerveza enana mientras jugamos partidas y partidas para luego olvidarnos de contar los puntos de victoria. A quienes me refiero... ya lo saben de sobra. ¡Qué demonios, incluso Bairrin lo sabe! Y es que me gustaría, de verdad que me gustaría poder articular un conjunto de palabras bonitas para ellos y que reflejasen de manera idónea ese torrente de emociones positivas que me produce el haberles conocido a todos ellos. Pero me temo que ahora mismo no se me ocurre nada...
… y que cuuumplas muuuchos mááás. :_)